13 abr 2016

EN EL 14 DE ABRIL, “No Me Acuerdo De Olvidarles”


 
“Con las primeras hojas de los chopos y las últimas flores de los almendros, la primavera traía a nuestra República de la mano” Antonio Machado

La Constitución de 1931, fue una de las más avanzadas de Europa
El gobierno de la II República estuvo basado en los ideales de Justicia y libertad y acabó con un golpe de estado militar que desemboco en la guerra civil que, a su término, mantuvo al país bajo una dictadura durante más de cuarenta años.
 
Con la llegada de la II República, las mujeres empezamos a ser consideradas, por primera vez en España como ciudadanas de pleno derecho y con la Constitución de 1931 llegó la Igualdad.
Tanto en la República, como durante la guerra y la postguerra, el papel de las mujeres fue fundamental. Con el aumento de derechos se abrió ante ellas un amplio campo de posibilidades para avanzar como personas, tanto en el ámbito familiar como en el público.
Su incorporación al mercado laboral las acercó a los movimientos obreros, así como a aumentar la conciencia femenina y la valoración de su condición social.
La igualdad de las mujeres, como tantos proyectos y tantas ilusiones, quedo en pañales tras la sublevación militar auspiciada por las clases sociales más adineradas y la Iglesia, que veían peligrar sus poderes económicos y eclesiásticos. La Iglesia ejercía un gran poder sobre las mujeres y con los avances educativos y culturales, con la generación de un espíritu crítico e independiente, veían en riesgo su poder, sustentado en la superstición y la ignorancia.
Durante la guerra civil, muchas mujeres tomaron parte activa en la contienda, unas de manera más social y otras desde los hogares, ayudaron a defender la causa republicana. Los hombres luchaban en el frente y las mujeres en las ciudades y pueblos, saliendo a las calles o guardando la casa y cuidando y educando a los hijos en los ideales que defendían sus padres
 "Las Trece Rosas"
                                                      
En ambos bandos hubo cárceles de mujeres, pero la forma de actuar fue muy distinta en uno y en otro. En las cárceles republicanas, siempre se las trató bien y con respeto, fueron muy pocas las reclusas y siempre por un motivo estratégico. Ninguna mujer murió en estos centros.
En la de Valencia estuvieron familiares de altos dirigentes fascistas:  una sobrina de Franco, Carmen Primo de Rivera, Pilar Millán Astray o Rosario Queipo de Llano, entre otras, esta última describía así su estancia "El edificio era hermoso y estaba rodeado de un frondoso parque en el que había naranjos, palmeras, eucaliptus y un pequeño pinar por donde nos permitían pasear un rato los domingos y sábados por la tarde. A lo largo de los amplios corredores estaban las celdas grandes y ventiladas. Desde las ventanas se  divisaban más allá del parque la espléndida vega valenciana”. En la prensa extranjera se llamaba a este centro penitenciario "La cárcel de las damas de España"
 
La realidad fue bien distinta para las presas republicanas, ellas recibieron un trato vejatorio y convivían hacinadas en condiciones inhumanas. Para la ideología franquista preñada de fundamentalismo religioso, la mujer republicana era la encarnación del diablo, eran reprimidas doblemente, por mujeres y por rojas. Fueron separadas de sus niños, muchos de los cuales nunca más volvieron a ver. Estas mujeres fueron ejemplo de valor y resistencia dentro y fuera de las cárceles.

En la película "La voz dormida" de Benito Zambrano se refleja claramente la vida de las mujeres republicanas en las cárceles franquistas.


 

"Nana de la Hierbabuena" Banda sonora de "la voz dormida" 
 
La postguerra fue lo peor, unas quedaron viudas, otras encarceladas,  muchas con los maridos encarcelados o exiliados, pero todas solas y marcadas. Incluso las que no tomaron parte activa durante el gobierno republicano, pero si eran familiares de rojos, fueron represaliadas y humilladas: les rapaban el pelo o las purgaban con aceite de ricino. Se quedaron solas con sus hijos, intentando resguardarlos de la inquina social y, a la vez, manteniendo vivo el recuerdo de sus padres ausentes.
 
"Las mujeres de los rojos"
 
El gobierno de la II República, fue considerado  un gobierno revolucionario, por sus proyectos basados en la Justicia Social y, la guerra civil española, la última guerra europea por la defensa de unos ideales. Después todo se cubrió de negro, de represión y de manipulación.
Aquí os dejo una canción desconocida, de aquella época, que alguien ha rescatado.
 
"Cuando el piquete me esté apuntando"

 
No se si llegará el día en que nuestro país se recupere de aquel desastre, que enfrentó a hermanos con hermanos y a padres con hijos; que nos dejó huérfanos de intelectuales y científicos; que arrinconó a las mujeres; que arrancó, de raíz, la esperanza en una vida mejor y más justa para empezar a plantar las semillas del capitalismo que, como la mala hierba, crece y sigue creciendo sin parar y sin que nadie lo pare.
 
-Pero yo, sigo creyendo en el poder de las personas-
 

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