EL CHACACHÁ DEL TREN



La mujer del tren de Edward Hopper

"Yo, para todo viaje,
siempre sobre la madera
de mi vagón de tercera,
voy ligero de equipaje.
Si es de noche, porque no
acostumbro a dormir yo,
y de día, por mirar
los arbolitos pasar,
yo nunca duermo en el tren,
y, sin embargo, voy bien.
¡Este placer de alejarse!
Londres, Madrid, Ponferrada,
tan lindos... para marcharse. .."

 (El tren, Antonio machado)

 

 

 

Si tuviera que elegir un medio para viajar, elegiría, sin lugar a duda, el tren. Considero que es el único en el que se puede disfrutar durante el trayecto, el viaje se convierte en un elemento placentero. Puedes leer, escuchar música, ver una película y sobre todo disfrutar del paisaje. Claro que, viajar en tren, tiene mucho que ver con una manera de vivir en la que la prisa no tiene lugar, aunque si la puntualidad.

Por la ventanilla

El tren ha formado parte importante de la historia de mi generación, desde aquellos primeros trenes con asientos de madera que soltaban carbonilla a su paso, (en estos nos desplazábamos sobre todo a Murcia pero a mi me parecía el más fascinante de los viajes) pasando por aquellos de mercancías que salían desde Alcantarilla, cargados de uva; de este menester nos encargábamos los chicos y chicas que desempeñábamos nuestro primer trabajo en los almacenes exportadores de nuestro pueblo, y que nos desplazábamos al pueblo vecino para cargar los vagones con las cajas de dichos frutos; nos gustaba esta tarea en concreto porque significaba salir de la rutina del almacén: Limpiar, envasar, acarrear…

Los trenes de viajeros fueron cambiando,  asientos tapizados, sin carbón, más rápidos y más limpios, hasta llegar a los que se utilizan actualmente, bastante mal tratados y con muchos años, porque su evolución se quedó estancada. De manera que Murcia es, junto con Extremadura, una de las dos regiones españolas que no cuentan con vías electrificadas. Nuestros trenes de cercanías son del 1982 y los Altaria de 1980 a pesar de que registran una gran actividad de viajeros, el tren sigue siendo uno de los transportes que mas utilizamos los murcianos.

Ahora, parece ser que llega una nueva época del ferrocarril, la era del AVE, y a mi no me cabe en la cabeza que se ponga en marcha un tren ultrarápido y ultracaro, que no solucionará, ni de lejos, el problema de los viajeros de cercanías; no acabo de entender la situación rocambolesca que se plantea en nuestra región y aún no he escuchado a nadie con los argumentos claros que lo expliquen.

Creo que lo sensato, lo justo, lo que beneficiaría a la mayoría, sería modernizar lo ya existente para que, quienes utilizamos este servicio público, no suframos retrasos, cada vez más frecuentes y disfrutemos de un servicio seguro y eficaz. Lo del AVE, además de caro no da respuesta a las verdaderas necesidades de la mayoría de los viajeros.

Parece que todo va en pos del Progreso y la Rapidez, eso merece ser pagado, Progreso: ¿Quién progresa? Rapidez: ¿para llegar a dónde? Caro: ¿para que lo utilice quién? Quizás la pregunta interesante sería: ¿A quién beneficia?

Lamentablemente un invento como el ferrocarril que, en sus inicios, sirvió para acercar ciudades y culturas, en Murcia, el AVE, en pleno siglo XXI, conseguirá (si no se remedia) todo lo contrario, dividir a las personas y , con un muro, los barrios y los pueblos.

No al muro Murcia. The Wall. Pink Floyd. Versión "El Muro". Soterramiento Ya