Jubilación viene del latín "iubilare " (gritar de júbilo) que, a su vez, viene del vocablo hebreo "Yobel". El pueblo hebreo seguía la Ley
de Moisés, según la cual, el hombre, una vez cumplidos los 49 años celebraba la
fiesta llamada Yobel para entrar en el año 50 meditando, reflexionando y
encarando la siguiente etapa de la vida lleno de gozo y alegría, disfrutando
con júbilo de todo lo conseguido hasta ese momento.
Pensiones y Jubilación, las
palabras más repetidas en los últimos días en nuestro país y no por algo bueno.
Lejos queda aquel concepto de
la vida según el cual dejar de trabajar significaba alegría y una oportunidad
para la reflexión y la meditación. Está claro que los tiempos actuales no son
comparables con aquellos, como tampoco lo son el significado de la palabra
trabajo ni la importancia de los mayores.
Conforme pasan los años y se
afianzan las doctrinas neoliberales ya instaladas, las personas importan lo que
su valor productivo. Si no produces no sirves, no importa la cantidad de años de
tu vida que hayas dedicado a trabajar y cotizar para el país en que vives.
En nuestro país, vivo ejemplo
de dicha ideología neoliberal, hay que rellenar el agujero provocado por los recientes rescates bancarios
y no tienen ningún empacho en utilizar, para ello, el dinero de las pensiones de los
mayores. Los mismos mayores que han visto como sus ahorros se iban por el desagüe
de las Preferentes o que fueron atacados por el copago farmacéutico.
Los defensores de este modo de
gobierno inhumano e injusto quieren, ahora para los próximos jubilados, que
sigamos trabajando hasta los ochenta años o que nos hagamos un plan privado de
pensiones, es decir que sigamos alimentando a los bancos, los mismos bancos de
las preferentes que no nos ofrecen ninguna garantía.
Mientras, los abuelos y
abuelas españoles ven como se debate su bienestar presente y futuro en
diferentes foros de “expertos”, también en el congreso de los diputados en el cual,
durante el debate sobre el sistema público de pensiones, no había ni un
representante del gobierno en sus escaños. Comprueban como se les trata
despectivamente y con total falta de respeto a toda una vida como ciudadanos
trabajadores.
Por ello han tenido que ponerse otra
vez manos a la obra y echarse a la calle para defender sus derechos, esos que
se ganaron con esfuerzo y que ahora les quieren quitar sin piedad.
Y no se nos
cae la cara de vergüenza.
"Me matan si no trabajo" Daniel Viglietti
Privatizar lo Público es una
de las bases principales del Neoliberalismo, ideología aparentemente invisible
pero que empapa todo lo que nos rodea, y en eso se están empleando a fondo,
ahora le toca al Sistema Público de Pensiones. Pero esto no ha hecho más que empezar.