A pesar de los medios, los
mercados y la perversa utilización que de ella se ha hecho, resurge la
POLÍTICA.
El otro día comentaba que
abstenerse era claudicar, rendirse, caer en la desesperanza. La abstención ha
sido grande, pero mucho menor que la esperada por algunos. La participación ha superado, en muchos
sitios, a la de anteriores elecciones europeas en épocas en la que estábamos
“encantados de la vida”.
No nos hemos rendido, eso ha
quedado claro, pero además el cambio de actitud, que se tradujo en la agradable
sorpresa con la que nos fuimos ayer a dormir, significa un antes y un después
en el conjunto social del país.
La POLÍTICA está de vuelta,
necesitamos que vuelva. Es necesario acercarse a los ciudadanos, bajarse de los
pedestales, dejarse de prepotencias y chulerías, abandonar los aires de
suficiencia que durante años han acompañado a las mayorías electorales que nos
han gobernado.
Los resultados electorales lo
dicen claro: somos personas y queremos que se nos trate como tales. Queremos
vivir y ser felices, esta debe de ser la prioridad del ser humano pero venimos
padeciendo a dirigentes que relacionan el bienestar con los mercados en vez de
con las personas.
Necesitamos ilusionarnos, poder
forjar un proyecto de vida que no dependa de que la jerarquía dominante tenga
unos u otros intereses.
Esperanza es lo que siento al ver
ese numeroso grupo de pequeños, y no tan pequeños, partidos que se han
afianzado o han surgido de los movimientos sociales y que han cambiado el panorama politico de nuestro país.
Por otro lado hay que obrar con
prudencia ante la situación europea con el resurgimiento de los partidos de
extrema derecha, la izquierda ha de intensificar su movilización.
Es el momento de que la izquierda
tome posiciones, mueva ficha de forma inteligente para jugar la partida que se
avecina, en definitiva tiene que hacer POLÍTICA. Hay que recuperar y restaurar
el significado de la misma:
"La política que, en su acepción más ética, se ocupa de la actividad, en virtud de la cual una sociedad libre, compuesta por hombres libres, resuelve los problemas que le plantea su convivencia colectiva. Es un quehacer encaminado a la Justicia Social.
La política es el ejercicio del poder que busca un fin trascendente y que promueve la participación ciudadana ya que posee la capacidad de distribuir y ejecutar el poder según sea necesario para conseguir el bien común."